Motobanquistas ultimaron al hombre frente a su esposa en San Agustín
Un taxista de 47 años de edad fue asesinado por una pareja de motobanquistas en San Agustín del Sur luego de que retirara 19 mil bolívares fuertes de una entidad bancaria.
Omar Servi Cobeña Arteaga, de origen ecuatoriano, recibió un disparo en la región escapular izquierda con salida por la región pectoral derecha cuando se desplazaba junto a su esposa Eugenia León en su Chevrolet Aveo de co- lor gris.
"Él me dijo que nos estaban siguiendo, dio varias vueltas para despistarlos. Andaban en un carro azul y en una moto. De pronto escuché como una bomba y el me dijo 'me embromaron'. Se me pegó del hombro y ahí expiró. Después llegaron unas personas y la policía", dijo la señora León. El llanto no le permitía contar su experiencia aunque sus parientes le daban consuelo.
La mujer recordó que el que les disparaba era el parrillero de la moto. Los criminales no los despojaron del dinero ni del automóvil. La pareja había retirado la suma de dinero en una entidad bancaria situada en la avenida Nueva Granada. Intentaban abordar la autopista Francisco Fajardo en San Agustín para dirigirse a Caricuao. Los antisociales huyeron del lugar.
El agraviado fue trasladado a la Clínica Popular de El Paraíso, pero ingresó muerto. Desde hacía tres años laboraba en la línea Gustaxis, ubicada en la urbanización Los Chaguaramos. Era casado y deja a dos hijos huérfanos.
Oliver Cobeña, hermano de la víctima, dijo que habían llegado al país hacía 20 años buscando una mejor vida. "Miren lo que encontramos. Yo tuve que llamar a mis padres que están en Ecuador para darles la noticia. A la gente la matan todos los días como perros. Hasta cuándo vamos a soportar esto", se preguntó el deudo.
"La inseguridad es tan grande que la gente va a tener que resolver sus problemas con sus propios medios. No sabemos cuándo el Gobierno va a enfrentar este flagelo", señaló.
El infortunado taxista había sido asaltado y despojado de su vehículo hacía algunos meses, pero esa vez los hampones no le provocaron lesiones graves.
Funcionarios de la policía científica presumen que existe complicidad entre empleados de la agencia bancaria y los asaltantes: las víctimas fueron seguidas una vez que abandonaron la entidad financiera.
Gustavo Rodríguez / El Universal
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